LINEA EXCALIBUR – INSTRUCCIONES DE USO
Particularmente versátiles debido a la capacidad del material para asegurar una temperatura uniforme y sin cambios bruscos de cocción, las sartenes de hierro requieren un mantenimiento específico para mantener inalteradas sus propiedades. En primer lugar es necesario un pretratamiento para protegerlo de la oxidación.
PRIMER USO:
- La sartén debe lavarse cuidadosamente durante unos minutos con agua caliente y detergente, para eliminar los restos de la capa protectora con la que se vende. Luego se debe enjuagar bien y secar inmediatamente con un paño y luego colocar en el horno a 70° hasta que esté completamente seco (alternativamente es posible calentarlo en el fuego) y habrá asumido un color gris azulado.
- La sartén de hierro no puede tener cambios bruscos de temperatura, así que asegúrate de no meterla en el horno que ya está caliente. Déjala enfriar dentro del horno.
- Con la sartén aún caliente, límpiela con una tira engrasada de aceite de semilla u otro aceite de cocina
- A continuación, limpie la sartén con un paño limpio hasta eliminar todo rastro de aceite e impurezas.
- Vuelva a poner la sartén en el horno a 70° (o sobre el fuego) durante unos minutos.
Al finalizar estos pasos ya no será necesario lavar la sartén con agua y detergente, pero bastará con limpiarla cada vez con papel absorbente o con un trapo grasiento. Si se encuentran rastros de suciedad persistente, continúe con las siguientes instrucciones.
Con el uso, el artículo tiende a adquirir un color intenso que tiende al negro, esta transformación de la superficie es normal y le da al producto una propiedad antiadherente natural. Además, ayudaría a proteger la superficie de la corrosión.
LAVADO DIARIO:
- Lavar a mano solo con agua caliente, sin dejar nunca en remojo, eliminando los residuos de cocción. En caso de residuos incrustados, utilice una esponja abrasiva. Secar inmediatamente con un paño o papel absorbente.
- Engrasar la sartén con un paño engrasado con aceite, y calentar en el horno a 70 ° (o sobre el fuego) unos minutos para secar la capa de aceite. Dejar enfriar de forma natural.
- Almacenar lejos de la humedad.
TRATAMIENTO DESINFECTANTE:
De vez en cuando, trate con sal de acuerdo con los siguientes métodos. Este tratamiento se utiliza para eliminar los residuos de cocciones anteriores y olores, dejando la sartén perfectamente seca, con una ligera función abrasiva.
- Calentar la sartén con un poco de aceite, espolvorear con sal gruesa haciéndola pasar 1 minuto y medio.
- Frotar la sartén con papel absorbente hasta eliminar los restos de cocción.
- Calentar nuevamente, repitiendo el procedimiento con sal fina y frotar nuevamente hasta que esté limpio.
- Calentar la sartén una vez más y engrasarla con aceite de semillas u otro aceite de cocina.
- Almacenar lejos de la humedad.
NÓTESE BIEN:
- El principal enemigo de la sartén de hierro es el óxido.
- Para evitar la oxidación, nunca lo dejes remojado en agua.
La sal es una de las principales causas de corrosión, asegúrese de eliminar cualquier rastro de ella durante el mismo tratamiento o durante el uso diario.
- Nunca sobrecalientes en una placa de inducción, para evitar dañar la sartén y el plato.
- Sobrecalentar o enfriar el artículo demasiado rápido puede dañarlo.
- Los alimentos ácidos (alcohólicos, limones, tomates …) podrían dañar la capa de bruñido provocando la aparición de manchas blanquecinas. Si esto ocurre tienes que repetir el procedimiento del primer uso.
- La sartén de hierro debe mantenerse siempre aceitada para evitar la oxidación.